Gary Florence presenció una experiencia que él consideró sobrenatural después de que su esposa, Robin, se recuperó de una hemorragia cerebral.
El declaró que el 3 de agosto de 2022 recibió una llamada de su esposa en la que ella le comunicó que no se encontraba bien.
“Cuando llegué al trabajo recibí su llamada. Ella estaba llorando y dijo: ‘Creo que estoy teniendo un derrame cerebral’. Así que salí de allí lo más rápido que pude”, testificó a CBN News.
Robin contactó a su hermana, quien la trasladó en ambulancia a un hospital cercano ubicado en Pensilvania, Estados Unidos, donde fue operada de manera inmediata.
“Estuve orando todo el camino. No tenía idea de lo que estaba pasando. Todo lo que sé es que mi esposa estaba llorando y creía que estaba teniendo un derrame cerebral”, contó sobre el momento.
Según el médico Evan Fox, quien trató el aneurisma de Robin, ella sufrió una hemorragia subaracnoidea debido a un aneurisma en la arteria basilar, una de las arterias que suministra sangre al tronco encefálico. El 22% de las personas no llega al hospital y el 71% no sobrevive a esta condición.
“Después de la cirugía, cuando entré en la habitación, la miré y me volví hacia la pared, luego comencé a llorar. Porque pensé para mis adentros: ‘Esa no es mi esposa’”, recordó el hombre.
Durante un período de varios días, la vida de Robin estuvo en peligro. Ante esta situación, Gary pidió la ayuda de amigos y familiares para que se unieran a él en oración.
«Había un señor de nuestra iglesia, me envió un mensaje de texto de nuestros intercesores. Decía: ‘Esto no es para la muerte, sino para la gloria de Dios’. Y yo lo creí», afirmó.
La recuperación de Robin sorprendió a los médicos que la trataban, aunque una enfermera recomendó monitorear su estado durante 21 días. No obstante, dos semanas después de la cirugía, su condición empeoró significativamente, lo que llevó a uno de los médicos a alertar a Gary acerca de la gravedad de la situación.
“Él dijo: ‘Todavía no estamos fuera de peligro. Pero no vamos a renunciar a ella’”, dijo.
Gary volvió a solicitar apoyo en oración para su esposa, y se tomó aproximadamente tres horas en llegar desde su casa hasta el hospital donde se encontraba Robin.
“Cuando llegué a casa y me estaba estacionando en el camino de entrada, escuché una voz tan fuerte y audible en mi espíritu, ‘¿El diagnóstico de quién vas a creer?’ Y en voz alta, dije: ‘Elijo creer en tu Palabra’”, declaró.
A medida que su familia y amigos seguían orando, Robin empezó a responder de nuevo.
“Al día siguiente, entré en la habitación y, mientras la miraba, pestañeó probablemente por primera vez en una semana”, recordó Gary.
Después del incidente, Robin tuvo una recuperación gradual y constante que duró tres meses, hasta que pudo recibir el alta médica. Actualmente, se encuentra totalmente recuperada y sin secuelas.
“Dios tenía a las personas adecuadas en el momento adecuado, exactamente donde tenían que estar para que yo pudiera sobrevivir”, dijo Robin.
“Me preocupaba que pudiera morir. También existía la posibilidad de que no volviera a su estado normal”, dijo el Dr. Eva Fox.
“Pero escuché que ahora está de regreso en el trabajo, lo cual es sorprendente y raro. Es muy inusual que alguien que haya tenido un sangrado tan significativo por este tipo de aneurisma, sobreviva así», continuó.
A pesar de que Gary y Robin ya tenían una fe sólida antes del incidente, afirman que esta experiencia los llevó a alcanzar un nivel de fe aún más profundo.
“Mi fe simplemente explotó porque vi la intervención sobrenatural y milagrosa de Dios. Vi con mis propios ojos a mi esposa pasar de la muerte a la vida. Él sanó a los leprosos. Sanó a la señora de un flujo de sangre. Y, sin embargo, debemos hacer cosas aún mayores como seguidores de Jesucristo”, dijo Robin.
Gary tiene la plena confianza en que Dios sigue siendo Dios en cualquier circunstancia y que Jesús está disponible para seguir haciendo milagros.
“Soy una mujer ordinaria, pero sirvo a un Dios extraordinario. Sé que Él me salvó. Sé que me tocó. Sé que Él me sanó. Y lo digo con toda convicción, y Él puede sanar a cualquiera en cualquier momento”, concluyó Robin con su testimonio.
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